El Ministerio de Economía y Competitividad ha dado a conocer
un informe sobre la “Reforma del Sistema Financiero”
En él, entre otras cosas se indica que a 31 de diciembre de
2011, la cobertura de los activos “tóxicos” por el ladrillo de las entidades
financieras ser:
-
Resto de activos problemáticos: 30 % de media.
-
Activos no problemáticos: suelo (21 %),
promoción en curso (13 %), producción terminada en cartera (49 %), etc.
Pues bien, durante la primera fase de la reforma financiera,
en febrero de 2012, se incrementaron 54 millones de euros, de la siguiente
forma que los Activos problemáticos:
-
Suelo (pasa del 33 % al 60 %),
-
Promoción en curso (pasa del 28 % al 50 % y
-
Promoción terminada (pasa del 25 % al 35 %).
¿Hasta donde va a llegar la
cobertura de estos activos?
Yo me pregunto, ¿no hubiera sido mejor para la banca
española, no haber ejecutado las hipotecas tan alegremente, y haber intentado
llegar a un acuerdo con los propietarios? Si hubiera sido así, en estos
momentos no estarían estos activos en sus balances. ¿No hubiera sido mejor
permitir que el antiguo propietario hubiera continuado en su vivienda, aunque
hubiera sido en alquiler? De este modo, hubieran percibido ingresos que
hubiesen compensado, en parte, estas coberturas.
Las exigencias de cobertura no para nunca, pues ahora en la
segunda fase de la reforma (mayo de 2012) se pretende que los activos no problemáticos,
cuya cobertura era del 7 % pase al 30%. Supondrá un incremento total de las
coberturas de 30.000 millones de euros, ¿de donde va salir este dinero?
De tal modo que parece ser que al final de la reforma el
tema se quedará, simplificando, del modo siguiente:
-
Activos problemáticos: provisión del 54 % como
media.
-
Activos no problemáticos: provisión del 30 %
como media.
¿Será la banca, y todos nosotros, capaces de absorber esto?
Un saludo cordial para todos y todas.
Gregorio Labatut Serer
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios que se deseen incorporar tendrán que ser moderados por el propietario del blog.